17/12/2019
La campaña de la ‘Operación Vivienda’ de Cáritas diocesana de Salamanca de este año lleva por lema ‘Padres con miedo a la oscuridad’, en relación a la pobreza energética que viven muchas familias a día de hoy. Esta organización ha apoyado a 1.417 familias a través de 2.911 ayudas, 332 más que el año pasado. A través del recurso de acogida y atención primaria, realizan ayudas de alquiler y suministros, además del acompañamiento a las familias y el asesoramiento.
Cabe destacar que el 37% de las ayudas del último año se han destinado para suministros, como el agua, la luz o el gas, y el 63%, para el alquiler. De este último aspecto, subrayan la subida de precio en los dos últimos años, que ha generado un mayor gasto por parte de Cáritas para ayudar a estas familias. En concreto, de 565.456 euros, más de 37.000 euros más que el año anterior.
La coordinadora de recurso de acogida y atención primaria, Oliva Martín, detallaba el perfil de las personas atendidas. “Familias y personas en situación de vulnerabilidad, que se enfrentan a situaciones como dificultad para hacer frente al pago de la vivienda, de forma especial, el alquiler, y muy minoritarias las hipotecas”, subrayaba. En este sentido, también advertía que las familias más vulnerables viven en régimen de alquiler en una proporción mayor, “y aunque las certificaciones por ejecución hipotecaria han disminuido, no lo ha hecho el número de desahucios por impago de alquiler”, que según las cifras que se manejan en España es del 70% de los desahucios.
Y al coste de las viviendas de alquiler, apuntan en Cáritas, se suman las dificultades de acceso, “por la solicitud de nóminas o el pago de varias mensualidades”. Esta situación ha generado que muchas familias vivan en habitaciones compartidas, “porque no pueden acceder a una vivienda completa para ellos”.
Otra característica que relató Martín es que se trata en especial de familias monoparentales, “encabezadas por mujeres, con cargas familiares, generalmente no compartidas”. Así como personas que viven solas, hombres, parados de larga duración, con escasos ingresos. Asimismo, se dan casos de personas cuyos ingresos por trabajo, “son insuficientes para cubrir sus necesidades básicas”, y en muchos casos, “desarrollan trabajos esporádicos mediante los cuales no pueden mantener la vivienda”.
Oliva Martín asegura que les preocupa la “cronificación” de los problemas que viven muchas familias, “signo de estos años que vivimos, tras la crisis económica que comenzó hace una década”. Y aunque la economía ha avanzado, desde Cáritas precisan que “muchas personas se han quedado atrás”.
Por su parte el secretario general de Cáritas Diocesana de Salamanca, José Mª Rodríguez, enumeraba algunas demandas enmarcadas en la ‘Operación Vivienda’, como, por ejemplo, que se reconozca que la vivienda, “es un derecho que el modelo residencial del Estado tiene que garantizar, que no se trate a la vivienda como oportunidad de negocio y la especulación económica”. Además, reclama que se sigan orientando los fondos públicos hacia aquellas personas con menos ingresos que han perdido poder adquisitivo, “y a las que el coste de la vivienda acelera el riesgo de pobreza”.
Los autores de la campaña han sido alumnos de la asignatura de Creatividad Publicitaria, de la Facultad de Comunicación de la Universidad Pontificia de Salamanca.
Todas las personas que quieran colaborar con esta campaña pueden hacerlo en las colectas parroquiales del próximo domingo, 22 de diciembre, o dirigirse a la sede de Cáritas diocesana de Salamanca, en la calle Monroy, número 2, así como realizar su donativo en cualquier entidad bancaria a nombre de esta organización diocesana, indicando en el concepto: ‘Operación Vivienda’, o a través de la página web: www.caritasalamanca.org y las redes sociales.