09/02/2022
SERVICIO DIOCESANO DE COMUNICACIÓN
“Acompañar en el sufrimiento”, es el lema de la campaña del Enfermo 2022, que arranca con la celebración de la XXX Jornada Mundial del Enfermo, el 11 de febrero, memoria litúrgica de Nuestra Señora de Lourdes, y concluye el VI Domingo de Pascua (22 de mayo), con la Pascua del Enfermo.
El tema escogido para la XXX Jornada Mundial del Enfermo está tomado del evangelio de Lucas: “Sed misericordiosos como vuestro Padre es misericordioso” (Lc 6,36). Acompañar a quienes sufren como consecuencia de la enfermedad es una obra de misericordia y uno de los fines fundamentales de la Pastoral de la Salud, por ello, este año, la campaña del enfermo pone su acento en la importancia de “acompañar en el sufrimiento”, de ser portadores de esperanza a cuantos sufren enfermedad, sin olvidar a sus cuidadores.
La Jornada Mundial del Enfermo fue instituida por el papa Juan Pablo II hace treinta años (13 de mayo de 1992), para “sensibilizar al Pueblo de Dios, a las instituciones sanitarias católicas y a la sociedad civil sobre la necesidad de asistir a los enfermos y a quienes los cuidan”, como recuerda el papa Francisco en su mensaje para la XXX Jornada Mundial del Enfermo.
Entre los objetivos que persigue esta jornada está ayudar al enfermo a valorar su sufrimiento, promover la formación espiritual y moral de los profesionales de la salud, favorecer el apoyo del voluntariado y de los equipos de pastoral de la salud, así como recordar la importancia de la asistencia religiosa a los enfermos como derecho inalienable.
El papa Francisco, en su mensaje, recuerda con agradecimiento que en este tiempo se ha avanzado bastante en las Iglesias locales de todo el mundo, pero, puntualiza, «todavía queda mucho camino por recorrer para garantizar a todas las personas enfermas, principalmente en los lugares y en las situaciones de mayor pobreza y exclusión, la atención sanitaria que necesitan, así como el acompañamiento pastoral para que puedan vivir el tiempo de la enfermedad unidos a Cristo crucificado y resucitado».
Por esta razón, el Santo Padre manifiesta su deseo que esta trigésima jornada mundial del enfermo “pueda ayudarnos a crecer en el servicio y en la cercanía a las personas enfermas y a sus familias”.
Con ocasión de la XXX Jornada Mundial del Enfermo, desde la Delegación diocesana de Pastoral de la Salud animan a la comunidad diocesana de Salamanca a tener presente en la oración y en las eucaristías del 11 de febrero a los enfermos, sus familiares y a los profesionales sanitarios. Además, invitan a participar en la eucaristía que se va a celebrar ese día, a las 19:00 horas en la parroquia de Nuestra Señora de Lourdes, en el barrio de Capuchinos de Salamanca, que será presidida por el vicario general de la diócesis y delegado de Familia y Vida, D. Florentino Gutiérrez. Al término de la misa los fieles peregrinarán con sus velas encendidas hasta la gruta de la Virgen, que se encuentra el jardín parroquial.
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