23/02/2021
En la celebración del Via crucis de las cofradías, celebrado el pasado sábado, 20 de febrero, en la Catedral Nueva, el obispo de la Diócesis de Salamanca, Carlos López Hernández, quiso recordar a los cofrades que, si no se pueden hacer manifestaciones de culto en la vía pública, “sí podemos intensificar primero nuestra oración personal”. Un llamamiento para realizarlo desde ahora, “para que el Señor nos conceda la gracia de vernos libres lo más pronto posible de esta pandemia”.
En relación a lo que se puede hacer o no la próxima Semana Santa, recomendó un poco de paciencia, “porque quedan 40 días, y si oramos mucho, y el Señor escucha nuestras súplicas, y la evolución va como hasta ahora, no podemos excluir que también algunas medidas de la autoridad sanitaria, puedan ser más flexibles”. Pero también advirtió que no se puede saber ahora, por lo tanto, hizo un llamamiento a la oración, y en segundo lugar, “a mantener la actitud de observancia absolutamente fiel de las normas que la autoridad nos vaya marcando, y ya no por mera obediencia servil, sino porque entendemos que es nuestra colaboración al bien común, cuidando la salud de todos nuestros hermanos”.
En este sentido, subrayó que ha sido “dolororísimo” el proceso que hemos vivido los últimos meses, “con tantas personas afectadas y tantos muertos cada día, por los cuales os invito a orar, por ellos y por sus familias, uniéndonos al dolor de tantas personas que una vez más han tenido que padecer estos sufrimientos sin el debido acompañamiento”.
Por otra parte, López Hernández quiso resaltar que hay que tener en cuenta que la pandemia, “nos ha hecho posible el descubrimiento de otras formas de comunicación, y de hacer partícipes a muchas personas de nuestras celebraciones”. Como ejemplo, el canal diocesano de YouTube, desde donde se retransmiten algunas celebraciones en directo, y como indicó el obispo, “son accesibles tal vez incluso a más personas que cuando teníamos las puertas más abiertas y tenían la posibilidad de venir a la iglesia”.
Carlos López marcó dos caminos para las próximas semanas. Por un lado, aseguró que en todas las celebraciones litúrgicas de las parroquias y de las iglesias, que son sedes de las imágenes titulares de las cofradías, “siempre sea visible una representación de la cofradía”, aunque lamentó que es una “cierta batalla que no siempre hemos logrado”. Asimismo, anima a la participación en las celebraciones litúrgicas de la Semana Santa, con los actos procesionales. “No tenemos disculpa, es una ocasión preciosa para acentuar nuestra vinculación con la parroquia, que, por otra parte, es un elemento tan resaltado en las normas sobre cofradías que todos hemos dado, y estamos intentado cumplir fielmente”.
Por ese motivo, reiteró a los cofrades su compromiso de que en todos los actos litúrgicos de la Semana Santa, “tengan una representación de la cofradía, que esté visible y presente en la comunidad parroquial”.
Por último, les alentó a ser creativos en estas circunstancias tan especiales que vivimos, “y sobre todo, en la celebración de actos menores, ya que no van a ser posible en la vía pública, pero que no disminuya la celebración interior de los misterios de la muerte y resurrección del Señor”.
El obispo confía en que al final de esta situación, se cantará el Aleluya, “con plena alegría”, y para dar gracias a Dios, “porque las consecuencias negativas de la pandemia van siendo cada vez más superables”.
Por su parte, el consiliario general de las cofradías, José Luis Sánchez Moyano, insistió a los cofrades en dos aspectos que han decidido entre las cofradías y hermandades penitenciales. En primer lugar, que todas las cofradías se sientan en comunión, “que estemos unidos, y lo haremos el domingo de Pascua, para celebrar el canto de Resurrección”. Además, se han unido para realizar un ejercicio de caridad, y como argumentó su consiliario, “nos vamos a unir en un gesto solidario”.