02/10/2020
Gonzalo Escamilla llega a la parroquia de Santi Spiritus con muchas ganas de asumir su nueva misión pastoral y tras despedirse el pasado sábado, 26 de septiembre, de la comunidad parroquial de Alba de Tormes, donde ha servido durante los últimos 16 años. Este presbítero sucede a José Francisco Martín, sacerdote operario y párroco de San Pablo, a quien hace justamente un año el obispo le envíó a la parroquia de Sancti Spiritus como administrador parroquial ante la enfermedad Miguel Ángel García, quien había sido su párroco desde 2012 y que falleció el pasado mes de abril.
El obispo de Salamanca, Carlos López Hernández, acompañará y presentará al nuevo párroco en la solemne eucaristía que se iniciará con la lectura del nombramiento. En el transcurso de la misa, Gonzalo Escamilla renovará las promesas de su ordenación sacerdotal, recibirá las llaves de la parroquia y el Evangelio, y tomará posesión de los lugares donde va a ejercer su ministerio parroquial (la pila bautismal, el confesionario, el sagrario y la sede).
Natural de Montalbo (Cuenca), donde nació el 8 de abril de 1960, Escamilla se ordenó sacerdote en Salamanca el 7 de noviembre de 1987. Es Licenciado en Sagrada Escritura por el Instituto Bíblico de Roma y sus primeros destinos pastorales fueron las parroquias de Endrinal, Monleón, Casas de Monleón y El Tornadizo.
En 1997, sería enviado a las de Rinconada de la Sierra, Navarredonda de la Rinconada, Tejeda y Segoyuela. Más tarde, asumiría las parroquias de Horcajo Medianero, Chagarcía Medianero y Herrezuelo. En 2004, fue nombrado párroco de Alba de Tormes y un año después, administrador parroquial de Anaya de Alba. En 2011, recibió el encargo también de Navales, Aldeaseca de Alba, Martinamor y Valdemierque. En 2015, el obispo le nombró párroco de Alba de Tormes, Anaya (Herrezuelo), Navales, Amatos de Alba, Garcihernández (La Lurda), Peñarandilla, Martinamor y Valdemierque.
Además, ha sido capellán del Santuario y Casa de Espiritualidad de Valdejimena, miembro del Consejo Presbiteral, director de la Escuela Diocesana de Animadores Cristianos y arcipreste del Arciprestazgo número 4. En la actualidad, este sacerdote es vicedelegado diocesano para el Clero y miembros de los Consejos presbiteral y del Colegio de Consultores.
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