10/12/2021
SERVICIO DIOCESANO DE COMUNICACIÓN
Una vez inicie el ministerio episcopal Mons. José Luis Retana, el próximo 9 de enero, se convertirá en el obispo número 96 de la Diócesis de Salamanca, tras la renuncia por edad de Mons. Carlos López Hernández.
El primer prelado de la historia de la Iglesia de Salamanca fue Jerónimo de Perigueux, Ieronimus, en 1102, monje cluniacense francés, que fue capellán del Cid, que al llegar a Salamanca trajo consigo el Cristo de las Batallas, que había sido llevado por Rodrigo Díaz de Vivar en sus campañas.
Desde el siglo XII hasta la actualidad han pasado por la diócesis cerca de un centenar de prelados, llegados de diferentes puntos del país. En los tres últimos siglos, XIX, XX y XXI, han sido un total de 20 obispos, desde Mons. Antonio Tavira, hasta Mons. José Luis Retana. El primero del siglo XX fue Mons. Tomás Cámara Castro, y tras él, le siguieron Francisco Javier Valdés Noriega, Julián de Diego García Alcolea, Ángel Regueras López, Francisco Frutos Valiente, Enrique Plá y Deniel, Francisco Barbado Viejo, Mauro Rubio Repullés, Braulio Rodríguez Plaza y Carlos López Hernández.
En cuanto a sus lugares de origen, de los prelados del siglo XX, eran naturales de La Rioja, Asturias, Guadalajara, Zamora, Murcia, Barcelona, Albacete, Madrid y Ávila. De hecho el obispo saliente y el entrante pertenecen a Ávila.