03/12/2021
SERVICIO DIOCESANO DE COMUNICACIÓN
La Asamblea Diocesana comenzó el 8 de septiembre de 2014 en la Catedral de Salamanca, y durante dos años, hasta octubre de 2016, se reunieron 1.700 personas en 200 grupos que reflexionaron sobre la situación de la diócesis, sus retos de futuro y las claves para renovarla espiritualmente, dinamizar su misión pastoral y actualizar sus estructuras y comunidades.
Fruto de ese trabajo, el obispo de la Diócesis de Salamanca, Carlos López Hernández, publicó un decreto de aprobación de las “Orientaciones de la Asamblea Diocesana. Directorio Pastoral de la Diócesis de Salamanca”, recogido en una publicación de 95 páginas, con varios capítulos. Entre ellos, las propuestas apostólicas de renovación, que se dividen a su vez en tres dimensiones: espiritual, pastoral y estructural.
En plena fase de motivación para la creación de grupos sinodales, el responsable diocesano del Sínodo, Policarpo Díaz, quiere recordar la importancia del camino recorrido en la Asamblea Diocesana: “Una de las grandes aportaciones de este Sínodo para nuestra Iglesia diocesana tiene que ver con la palabra recordar, volver a pasar por el corazón, revisar este camino sinodal que ya hemos caminado juntos, renovarlo, hacerlo vida, ponerlo en práctica con las orientaciones concretas que hemos aprobado por todos”, subraya.
El vicario de Pastoral asegura que es preciso “volvernos a colocar en esto que hemos construido entre todos, porque la Asamblea Diocesana fue sinodal, un camino recorrido por todos”. Además, insiste en que el obispo Carlos, “nos ilustraba en la introducción de las Orientaciones de la Asamblea Diocesana”. En ese sentido, “la comunidad diocesana suplica el don del Espíritu santo para que nos ilumine y nos aliente en nuestro propósito de renovar tras las huellas de Jesús, la vida y la misión de la Iglesia en Salamanca”.
Policarpo Díaz reconoce que se estaba ya acogiendo “con alegría y con esperanza” las Orientaciones de la Asamblea Diocesana, “hasta que llegó la pandemia y puso todo patas arriba, y nos cerró todas las posibilidades de seguir caminando”.
En la Asamblea, 236 personas participaron como delegados de la misma, representando a toda la diócesis, 135 de ellos laicos. En el documento de las Orientaciones, recuerdan que la Asamblea Diocesana en su camino de “renovación espiritual”, llama a “enamorarnos de nuevo del Señor”.
Este responsable insiste en que el Sínodo, “es una oportunidad magnífica” para revivir la Asamblea“. De hecho, Policarpo Díaz ha adelantado que la primera ficha de trabajo que se enviará a los grupos sinodales tiene que ver con ese documento de las Orientaciones, “con lo que hemos vivido, sentido y caminado, con el fruto que se dio en ese tiempo”.
Cabe recordar que el plazo para constituir los grupos sinodales finaliza el 31 de diciembre, y deberán formalizarse a través de esta ficha, donde se refleja el listado de sus integrantes, con sus teléfonos y correos electrónicos, y con una firma previa de consentimiento para la protección de datos. Una vez cumplimentada, se entregará en la consejería de la Casa de la Iglesia o a través del correo electrónico: pastoral@diocesisdesalamanca.com.
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