ACTUALIDAD DIOCESANA

La comunidad diocesana de Salamanca ha acogido con esperanza y gratitud la elección del papa León XIV.  Diversas voces, como la del rector de la UPSA, Cáritas diocesana; el decano de la Facultad de Derecho Canónico y la Hermandad Obrera de Acción Católica, han compartido sus primeras impresiones que se suman a las del vicario general, el vicario de pastoral, el director del Servicio diocesano de Misiones y la comunidad del Colegio San Agustín

Como primera aproximación al personaje, me parece una síntesis muy interesante de alguien que es norteamericano de origen pero nacionalizado peruano, y que ha desempeñado gran parte de su actividad pastoral en Perú, en Chiclayo. Por otra parte, fue nombrado cardenal por el papa Francisco, quien le confió, ni más ni menos, el Dicasterio de los Obispos, encargado de la gestión del nombramiento de obispos. Además, la elección del nombre León XIV es significativa, porque remite a León XIII, el papa de las grandes encíclicas sociales.

Desde Cáritas Salamanca, queremos expresar nuestro agradecimiento a Dios por el don de este nuevo pastor universal. Confiamos en que el pontificado de León XIV será un tiempo de escucha, misericordia y fraternidad.

Que Dios le bendiga y le conceda sabiduría, paz y fortaleza.

La elección del cardenal Prevost como nuevo papa ha sido recibida con entusiasmo y esperanza tanto dentro como fuera de la Iglesia Católica, después de unos días de tristeza y luto por la muerte de Francisco. Aunque su nombre sonaba entre los “papables”, no era de los de primera línea.

El primer papa de EE.UU, con un perfil muy rico, donde se combinan la experiencia pastoral y misionera, el compromiso con la justicia social y una profunda espiritualidad (no olvidemos que es religioso agustino). El nombre que ha elegido es ya una declaración de intenciones, siguiendo la estela del gran papa León XIII con el que se sentaron las bases de la doctrina social de la Iglesia.

Ha sido cercano colaborador del papa Francisco como prefecto del Dicasterio para los Obispos, lo que sugiere que habrá continuidad en las reformas iniciadas, especialmente en áreas como la opción preferencial por los pobres y vulnerables, la sinodalidad o la lucha contra los abusos.

Su llamada a la paz y a la unidad de la humanidad, destacando la necesidad de construir puentes mediante el diálogo, es todo un reto para la Iglesia en los próximos años. Además, es buen conocedor del Derecho canónico, lo que seguramente hará que las necesarias reformas tengan reflejo en la modificación de la Ley de la Iglesia para que responda mejor a los retos de la evangelización en el momento presente.

Creo que su elección es una bendición para la Iglesia y una oportunidad para fortalecer su misión en el mundo actual.

Me emociona y alegra poder felicitar al nuevo papa León XIV, a quien doy la enhorabuena y deseo lo mejor para su pontificado. Que el Espíritu Santo lo acompañe siempre en este servicio que inicia, en el que enfrenta importantes retos en la Iglesia a la que le toca animar y dirigir para que sea una Iglesia sinodal y de comunión, que necesitamos en este milenio. Una Iglesia que debe poner en el centro a los pobres, la denuncia de un sistema económico inhumano y materialista, y la importancia del trabajo para asegurar una vida digna a cada persona. Encarnada en las realidades, cada vez más complejas, de nuestras sociedades, en la que se atienda a los descartados, que luche por asegurar la paz en tantos lugares; también techo, tierra y trabajo para los empobrecidos, y cuidado de la vida humana y del planeta, nuestra casa común. Una Iglesia que cambie por dentro para acoger realmente a todos y todas, y tenga en cuenta la igual dignidad de bautizados y bautizadas, y el protagonismo de los laicos para estar presentes en el mundo.

Los militantes de la HOAC seguiremos gastando nuestras vidas en la misión de esta Iglesia que camina junta y hace presente a Jesús en el mundo de hoy, que tiende puentes y abre diálogos para el amor, estando cercana a quienes sufren, como nos ha recordado en el saludo tras su elección. Por un lado, ha anunciado una evidente continuidad con respecto a la obra del papa Francisco. Esperemos de León XIV una mirada similar hacia el mundo empobrecido, como la que parece haber practicado como obispo en Perú.

Para finalizar, me parece importante el nombre elegido, y me hace pensar en León XIII, creador de la Doctrina Social de la Iglesia, que cuidó mucho el magisterio social y que miraba de frente al mundo obrero. Me resulta interpelador y me genera ciertas expectativas.

De las cosas nuevas: Un papa misionero para un tiempo nuevo

In Illo uno unum («En el único Cristo somos uno»)

Los agustinos de Salamanca, “contentos y emocionados”, tras la elección del papa León XIV

Un misionero elegido papa